En cada cumpleaños, reyes, buenas notas e incluso algún Ratoncito Pérez, suele caer un juego de mesa, en este caso fue el laberinto mágico un juego muy entretenido.

Desde pequeña siempre me ha gustado mucho jugar a juegos de mesa, con mi hermana, amigos y ahora me sigue encantando.

Yo creo que mis hijos han salido a mí, porque también les gusta mucho.

Éste cayó para el cumpleaños de mi hijo, lo compró mi marido, y la verdad que fue todo un acierto.

Es un juego para la memoria, hay que intentar recordar donde están colocados los muros de debajo del tablero según te los vayas encontrando.

Tanto los tuyos, como los de tus contrarios.

Tienes que llegar lo antes posible a por el símbolo que sacas de la bolsa sin que se te caiga la bola por culpa de dar en un muro.

Porque sino tendrás que volver a empezar desde el principio.

No es monótono, ya que los muros nunca se colocan igual y la dificultad de las partidas depende de la cantidad de muros que pongas.

Puede durar entre 20 y 30 minutos, y pueden jugar de 2 a 4 personas , mayores de 6 años

Es divertido porque te hace estar en tensión y muy concentrado.

En alguna ocasión me ha pasado que sólo me falta un símbolo para coger los 5, estar a una casilla de él, al ir a cogerlo caerse la bola y tener que volver a empezar.

¡Te da una rabia!, a la vez que todos se ríen de ti.

Es muy fácil de entender

Es ingenioso y original, debajo del tablero hay una bola metálica que mueves con el peón gracias a un imán.

Por eso cuando te topas con un muro la bola cae.

Para empezar a jugar, lo primero que tienes que hacer es colocar los muros a tu elección, pero siempre tienes que dejar un camino abierto para llegar a los símbolos y poder salir de tu salida.

Después colocar encima el tablero donde se encuentran las imágenes de los símbolos y girar la caja varias veces para no saber como están colocados.

En ese momento se dice en voz alta

¡El laberinto gira y gira, los muros se desvanecen, los caminos aparecen!

Meter todos los símbolos dentro de la bolsa negra.

Elegir cada uno un peón y colocarse en la casilla de salida que están en las esquinas, se extrae un símbolo mágico de la bolsa.

Por turnos, el primero tira el dado avanza arrastrando el peón casilla a casilla, (nunca en diagonal) con cuidado de no chocarse contra el muro, y así todos.

El primero que llegue a la casilla con el símbolo ¡se lo queda! y se acabaría tu turno en ese momento.

Sacas un símbolo mágico y si alguien se encuentra encima del él se lo queda y éste jugador igual, se le acabaría su turno y volvería a sacar otro.

En el Laberinto Mágico gana el primero que consigue 5 símbolos mágicos.

Se llevó el premio Kinderspiel des Jahres como mejor juego del año del 2009

Editorial: Devir

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Ideas en familia.